jueves, 3 de diciembre de 2015

El club de las plañideras

El hipsterio es un lugar para las mujeres modernas. Ya me entendéis, profesionales liberales, creativas alocadas, ejecutivas de la industria de la moda...ese perfil. Nada de marujismo y/o ñoñez. Mujeres de armas tomar del siglo XXI.

Como se enteren de lo mío me van a largar cagando leches.

Y es que ya lo comentaba el otro día en Twitter: lloro por todo, soy la reina de las magdalenas y magdalenos, la diosa de la ñoñez, una plañidera sin parangón. Candy Candy en sus mejores momentos.


¿Que no? Veamos algunos ejemplos reales. 

Yo voy andando por Sol un domingo en el que hay una mani contra el cambio climático y se me caen los lagrimones pensando en lo maravillosa que puede ser la humanidad, que es capaz de reunirse para luchar por el bien común y dejar un planeta mejor a las generaciones venideras. Así con un par.

Yo escucho una canción melancólica mientras coloco el equipaje de mano en un avión, y me tengo que contener mucho, muchísimo para no romper a llorar desconsoladamente, porque me imagino un tío andando solo bajo la lluvia en una ciudad gris, con las manos en los bolsillos de la gabardina, mirando al suelo, sin ganas de regresar a una cama vacía donde todavía huele a ella, que no va a volver.

Yo entro en Santa Sofía y al amigo Stendhal le dejo a la altura del betún, que me dura la llantina media hora larga. 

En definitiva, que soy una romántica extrema a pesar de los pesares. ¿Por qué el mundo me ha hecho así, por qué? 

Y peor aún, parece que esto empeora con los años. 

Claaaaaaro, luego pasa lo que pasa, que a veces la hipster también tiene que mantener conversaciones serias sobre la vida y el amoooooool, acabáramos. Hecatombe, holocausto, crisis geopolítica a la vista.


No acabo ni una puñetera frase. Si toca abrir el corazón y hablar de lo que de verdad importa en la vida, se me hace un nudo desde la boca del estomágo hasta la boca-boca y, ¡ele!, pack completo: manos temblorosas, hilillo de voz y ojos vidriosos. ¡A llorar!

Señores, esto es muy grave. Es muy grave porque ya llega un punto en el que parece que soy puro drama, cuando no todas las lágrimas son iguales ni todos los lloros son de tristeza, también en esto hay escalas, pero a ver quién es el guapo que descifra un lenguaje tan primitivo sin estar en mi cabecita. Y es muy grave porque me impide expresarme como las personas adultas de verdad, decir lo que siento sin parecer lerder.

Molaría no parecer lerder.

¿Consejos?

¿Cuál es la gilipollez más gorda por la que habéis llorado?


11 comentarios:

  1. Niña de mis eyes!! Viva la emoción y viva el corazón!!
    Eso demuestra que le pones sentimiento a la vida! Y eso a mí I like very very jajajaja
    Es cierto, a veces nuestras vidas están tan a flor de piel que lo súper mega extra sentimos todo! Y parecemos grifos andantes.

    Yo tb tengo esas temporadas y la gente de mi alrededor se asusta!! No temáis gentes del lugar que tb lloro de felicidad!!!
    Y es que cuando me emociono, sea bueno o malo, lloro!
    Pero que esto no es malo ni mucho menos!! Aunque a veces merme nuestra capacidad comunicativa jajajaja.

    Ea! Lloroterapia pa to cristo!!

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    1. India, my dearest friend! Que sí, que viva la emoción y el corazón, lo que tu quieras, enizinyuguant, pero un poquito de control, por favor. Que somos intensitas de cojones... ¿Institucionalizamos la lloroterapia y a tomar por saco, por lo menos nos forramos con el nuevo método de manipulación psicológica? ;)
      Ele, otra vez me ha salido la vena dominadora del mundo... no tengo remedio :)

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  2. Hola¡¡¡ Primero he de decirte que nunca he visto Candy Candy, Y pq? te preguntarás. Pues pq mi madre no me dejaba verla. Decía que es muy triste. Así que ya ves, protegida desde pequeña para las tristezas y luego mírame, plañidera como la que más.
    Ese nudo gargantil del que hablas es lo peor, yo he tenido que luchar con el desde siempre. Se forma, se agarra bien y hay que callarse, cualquier palabra que salga a partir de ese momento por tu boca se convertirá en llanto irremediablemente.
    Sin ir mas lejos contando tu primer ejemplo de la manifestación ya se me ha formado. Y es que te entiendo perfectamente (ya se me están poniendo los ojos vidriosos). Entiendo como pude llegar a colmarte ese sentimiento de que magnifica es la humanidad viendo ese momento...y como eso hace que una sienta ganas de llorar.
    Yo he llorado por todo tipo de situaciones, ademas algunas tan tontas que no me lo creo. Simplemente pq me haya salido mal una comida, en anuncios de TV, viendo a un abuelito muy mayor solo haciendo la compra, un gato solo andando por la calle...Eso de los animales es el súmmum de la tristeza para mi.
    Hasta pidiendo una excedencia en el curro hace años...tuve que ensayar mil veces antes de entrar en el despacho del director.
    Y que hacemos? Pues esto yo creo que es como la infertilidad, yo ya lo he aceptado. Soy asi y punto. Pq luchar contra esto es misión imposible.
    Un besito bonita¡

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    1. Insolita, ¡¡te gano!!! Yo tampoco he visto Candy Candy, ni Heidi, ni Marco... mi madre me los prohibió cuando era pequeña por los disgustos que me pegaba. Eso sí, no anduvo lista y me dejó ver La Aldea del Arce, ¿sabes qué dibujos te digo?, esos de la conejita con un collar de perlas en la oreja (se ve que era una conejita pija ya por aquellos entonces), y gensanta, aún me acuerdo de la llorera que me di con el capítulo final.
      Yo lo acepto también, a ver qué vamos a hacer. Cómo actriz dramática tengo un futuro prometedor, está claro...

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  3. Ya sabes que aunque también me da cosica que me vean soy defensora de llorar y llorar bien, pero de puertas pa'dentro y sin público (y a 120 km/h por la autopista con la música a toda hostia se llora y se grita a pulmón de p.m.) y desde entonces me pasa un poquito menos, pero a veces también me sorprendo con la lagrimilla ahí a punto de estallar por la cosa más absurda y arbitraria y me muero de la vergüenza...
    Ya te conté que la última llantina gorda me la pegué con Breaking Bad, pero bueno, es que me sale la vena maternal con el personaje más torturado y me dan ganas de adoptarlo y ahí te das cuenta de que ya te has hecho vieja de verdad, en vez de imaginar una noche loca de pin pan pum con el medio guapito de turno quieres acogerlo en plan madre, eso sí que es para ponerse a llorar y no parar...

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    1. Nubecita del campo, yo a eso de llorar encerrada en el coche le veo un problema, y es que yo solo sé conducir escuchando chunda-chunda. Verídico, rollo poligonera (lo negaré en cualquier juicio con testigos). Y, mira, con David Guetta a todo trapo, workhard-playhard chuchuchuchu, pues no me salen los lagrimones. Igual es que no lo he intentado lo suficientemente fuerte, que con mis antecedentes, lo logro fijo.

      ¿Vena maternal con un tío que está para pin pan pum? Eso me preocupa, chata, no se puede dejar pasar, puede ir a peor, ¿tú te lo has mirado con un especialista? Yo lo llamo el síndrome "a mis pechos", sí, sí, sí, que lo abrazarías como un peluchillo, ¿sabes lo que quiero decir, verdad? Jajaja, es fatal para la vida. Efectivamente, pa llorar sin consuelo :) :)

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    2. Pido cita con la psicologa a la de ya... Lo prometo! 👆

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  4. Amorrrrrr!

    Yo, super ñoña "perez" no te puedo dar consejos p q no llores. Yo lloro por todo, y mantener conversaciones "durillas" con Hubby y con mi family y amigos es imposible sin meter por medio varios hipos, y suspiros y voz entrcortada ...

    Llorar es bueno, o eso me repito, y Nube me lo ha reafirmado, asi q encantada d q me den la razón, q ocurre poco.

    Y por qué lloro? Por todo, por una puesta d sol, por un bebé q sonrie, cuando veo anuncios, el ultimo, uno alemán con el q he llorado cada vez q lo veo, y q voy a copiar en twitter p q todas lloremos a gusto. Ah, y por la Navidad, las luces y el olor

    . Ñoña HopeMary

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    1. Hermosérrima, si es que teníamos que haber sido mujercitas pálidas y frágiles del siglo XIX, nos hemos equivocado de época, y estamos como desubicadas. Así no se puede vivir en paz y armonía con el entorno...

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  5. Yo lloré con la peli del Rey León, pero no cuando muere el padre de Simba (secuencia super dramática), no, no, no... Yo lloré al principio de todo,, cuando todos los animales de la jungla van a conocer al nuevo hijo del rey de la selva... esas jirafas, esos pájaros volando al mismo ritmo, esa música... Qué lagrimones se me caían!!!

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    1. Chata, si empiezas ya la peli del Lion King a lágrima viva, ¿qué te espera después? Nada bueno, que la Disney lo del drama lo maneja que te cagas... Mira, estoy pensando en "yaaaaaaaaaaaa chigueñaaaaaa bababiiiiii bababaaaaaaaaaaaaaaaaa" y voy a tener que ir a buscar un kleenex ya mismo. Maldita sea.
      Gracias por pasarte y comentar, Sarita, espero verte más a menudo por estos lares :)

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